Dientes torcidos. Los tratamientos.
El tratamiento para mejorar los dientes torcidos en adultos consiste en colocar ortodoncia; no hay límite de edad cuando los dientes están sanos y tienen suficiente estructura ósea. Hoy en día existen opciones estéticas de aparatología en ortodoncia, como los aparatos invisibles para corregir la mala posición dental en adultos.
Los dientes se desplazan durante toda la vida cambiando su posición natural por el crecimiento o la reducción del hueso alveolar, el cual tiende a retroceder por la presión constante. Habitualmente los problemas dentales se corrigen en la niñez o primera adolescencia para evitar problemas de caries, encías, dificultades digestivas, al hablar, al morder y masticar.
Corregir dientes torcidos.
Básicamente, la ortodoncia ayuda a desplazar los dientes hacia la posición deseada por medio de la fuerza que ejercen los elásticos y los alineadores. Sin embargo los dientes tenderán a moverse para tomar su posición anterior; por esto la fase de retención posterior al tratamiento de ortodoncia es fundamental y en algunos casos puede durar toda la vida.
Dientes torcidos en adultos. Los correctores dentales.
Los correctores dentales en los adultos dan el mismo resultados que en los niños, aunque el tratamiento suele ser más prolongado. Cada vez más aumenta la tendencia entre los adultos que desean corregir los dientes torcidos principalmente porque quieren sentirse mejor con su apariencia solucionando complejos estéticos y cosméticos que han acarreado por años como:
el inevitable desgaste natural y prematuro de los dientes,
caries y enfermedades gengivales,
necesidad de colocar prótesis e incluso recurrir a prácticas reconstructivas para corregir problemas más serios.
Aparatos para dientes. Corregir dientes torcidos.
Los aparatos de ortodoncia están hechos a medida y si bien muchos eligen la opción tradicional de correctores de metal, existen nuevos correctores dentales que son más pequeños, menos visibles y removibles para corregir los dientes torcidos:
de metal, brackets hechos de acero inoxidable de alta calidad que se adhieren a la parte frontal de los dientes.
de cerámica clara, se colocan en la parte delantera de los dientes y a diferencia de los metálicos se notan mucho menos, pero pueden romperse con más facilidad.
linguales, brackets que se colocan por detrás de los dientes y no se ven.
“invisibles”, aparatos transparentes, personalizados y removibles, son más higiénicos ya que al retirarlos para comer no permiten que se adhieran restos de comida y placa bacteriana entre los dientes.
